Educar es...

Aquí dejamos un breve relato sobre lo que es educar según Grabiel Celaya 

¡Esperamos que os guste!

“Educar es lo mismo

que poner motor a una barca

hay que medir, pensar, equilibrar…

… y poner todo en marcha.

Pero para eso

uno tiene que llevar en el alma

un poco de marino…

un poco de pirata…

un poco de poeta…

y un kilo y medio de paciencia concentrada.

Es hermoso soñar,

mientras uno trabaja,

que ese barco, ese niño,

irá muy lejos por el agua.

Soñar que este navío

llevará nuestra carga de palabras

hacia puertos distantes, hacia islas lejanas.

Soñar que cuando un día

esté durmiendo nuestra propia barca,

en barcos nuevos seguirá,

nuestra bandera enarbolada”.

Gabriel Celaya

Anatomía de una Maestra de Infantil

La canción de los profesores

Ser docente: Más que una profesión

Más que meros instrumentadores de programas, los docentes son profesionales reflexivos, como ya han apuntado diversos autores.

La docencia enfrenta la paradoja de que sus resultados se ubican en la esfera de otro sujeto, 

es decir, un buen docente se identifica a partir 

de los aprendizajes de sus alumnos, pero son 

ellos, y sólo ellos, los que aprenden.

La docencia estará caracterizada por crear el ambiente, ese mundo, de significados compartidos; escenarios en los que se apoye, facilite y medie la construcción de quien aprende. Y he aquí el componente artístico de la docencia: es un poco de técnica pero mucho de inspiración.

Juan Castillo Hernández. (2012)

¿Bailamos?

Un vídeo donde la hija le da una gran lección a su padre sobre como disfrutar de la vida.

Ester Ramírez Avellaneda

 Estudiante de primero de Educación Infantil en la universidad de Málaga

                                     ¿Por qué he decidido estudiar esta carrera?                                                                    

   Elegí esta carrera porque siempre he disfrutado mucho con las risas, las aventuras, la imaginación y la inocencia que tienen los niños; también, porque recuerdo esta etapa de mi vida con mucho cariño ya que disfrute mucho en ella; y porque pienso que en la actualidad esta etapa no recibe la atención y las ayudas que necesita. Por todo ello, quiero ser un acompañante de los niños en el comienzo de su aprendizaje para que recuerden su infancia como la mejor etapa de sus vidas al igual que yo.

Irene Alarcón Lobato

Estudiante de primero de Educación Infantil de la universidad de Málaga

¿Por qué he decidido estudiar esta carrera?

¡Buenas!, como bien indica el título, me llamo Irene. Realicé mis estudios en el I.E.S Santa Barbara, pero realice el bachillerato en la Escuela de arte de San Telmo. Cuando finalicé el curso me presente a selectividad, y ahora mismo aquí me encuentro, por fin he conseguido llegar después de tantos años a la carrera que siempre he querido escoger desde que empecé el instituto. Siempre he querido ser maestra de educacíón infantil, principalmente porque me gustan los niños, pero también se debe a que pude tener una buena etapa en preescolar y tengo muy buenos recuerdos. No cabe duda que sí he conseguido llegar hasta aquí es gracias a mi familia, por el apoyo que me han dado siempre para alcanzar mis metas y propósitos, y para mí ésta ha sido una de ellas. Espero disfrutar y aprender mucho durante estos 4 años y poder llegar a ser una buena maestra.

Saludos.

Juan José Miguel Duarte

Estudiante de primero de Educación Infantil de la universidad de Málaga

¿Por qué he decidido estudiar esta carrera?

Sinceramente, desde siempre he querido estudiar  Educación Infantil. Yo estudié educación infantil y primaria en el C.E.I.P. Benito Pérez Galdós y E.S.O. y Bachillerato en el I.E.S. Sierra Bermeja y tengo unos recuerdos maravillosos recuerdos de ambos centros. Dicen que de pequeño nunca se tiene claro la profesión que se quiere ser de mayor, pero ése no es mi caso. Todos mis compañeros, a medida que iban creciendo, iban cambiando de profesión: algunos pasaban de querer ser policía a ser químico, otros, de ser médico a ingeniero, y así casi todos. Pero yo no, recuerdo que mi etapa de Educación Infantil fue tan buena que quería dedicarme a ello y que los niños a los que yo eduque disfruten de la misma manera como yo lo hice en mi niñez con mi maestra, es más cuando acabé la educación infantil y supe que mi profesora ya no volvería a darme clase, comencé a llorar sin parar. Es por eso que mi propósito llegar a ser un docente ejemplar y que "mis niños" sientan conmigo lo mismo que yo con mi maestra. 

Ana Nerea Pérez Moreno

Estudiante de primero de Educación Infantil en la universidad de Málaga. 

¿Por qué he decidido estudiar esta carrera?

Todos sabemos y hemos oído ese constante cambio de profesión que van diciendo los niños cuando son pequeños, dependiendo de la época en la que se encuentre decide que de mayor va a ser un gran astronauta para conocer la luna y vivir alli, otras eligen ser peluqueras para ir todos los días con un peinado diferente, a los que les gusten jugar a los médicos, querrán ser médicos o cantante al que le guste cantar. Cualquier cosa como una simple película hace que el niño decida qué quiere ser de mayor; un ejemplo de esto es el gran entusiasmo que siente mi hermana por llegar a ser una gran bióloga marina tras haber visto la película de Liberad a Willy. Es por ello que los adultos no dan importancia a estos comentarios de niños, pues saben que más pronto que tarde cambiarán su decidida profesión. Se podría decir que yo soy una clara excepción de ello. La primera vez que entré al colegio no había un sólo día en el que no me agarrase a mi madre suplicándole que no me dejara ahí. Fueron pasando los días, incluso las semanas e inexplicablemente llegó un momento en el que los berrinches me los pillaba diciendo que quería ir al colegio, ya fuese lunes o domingo, yo quería ir al colegio para disfrutar a la vez que aprendía con el resto de mis amiguitos. Es por ello que desde los 3 añitos, le decía a mi madre: -Mamá, de mayor voy a cuidar a los niños pequeños como yo. Voy a ser una gran maestra como lo es mi seño Elisa. Nunca cambié de profesión, mantuve esa idea durante 15 años y no veía el día en el que se hiciese realidad. Y como todo llega, aquí me hallo, estudiante de educación infantil, como siempre lo he soñado.

¡BIENVENID@S!